Esperando [Kelly]

Me había duchado y había ido a trabajar como si nada. Todo parecía en orden y nadie me había mirada de manera extraña, cosa que había sido un verdadero alivio. Me había tocado encargarme de las camaras de seguridad, y extrañamente no había nada de raro. Salí un poco antes y paré de caminar cuando vi delante de mi el instituto, en una ciudad tan pequeña como ésta solo había uno. Miré el reloj y me apoyé en la pared de enfrente, fumando un cigarro.

Tuve que pasar por casa corriendo en una ducha espress y sin comer nada. Cogí dinero y por los pelos alcancé el autobús que después de 15 minutos me dejó en el instituto. Las clases fueron normales, aunque estaba algo nerviosa al ver cómo desaparecía los efectos del Battery, sabiendo las consecuencias que traían. Además pensaba de forma incosciente en Dan, y no quería. A la salida del instituto, Clive, un chico unos años mayor que yo, de último curso me guardó algo en el bolsillo trasero del pantalón. Suspiré aliviada. Había recibido mi mensaje urgente. Le sonreí hasta que puso su brazo por encima de mis hombros mientras salíamos del instituto, bajando ya las escaleras que daban a la calle. Ya abajo intentó besarme, pero me aparté ágil.

-¿¡Qué haces gilipollas?! -le grité y él me puso la mano en la boca para qu eno lo hiciera.

-¿Creías que era gratis, monada? -rió a carcajadas y me soltó, pero volvió a sujetarme la barbilla, zafándome como pude, era un bruto.

-¿No recuerdas cómo te salvé el culo de aquellos soldados de SCACECROW? Me debías una, y me la estoy cobrando.

-¿Tengo que repetirte que lo que buscaban era tuyo?

Volvió a inclinarse para besarme y le di un tortazo.

-Párate, joder.

Me separé de la pared al ver salir a Kelly, pero fruncí el ceño al ver la escena. Me acerqué serio y miré al chico, poniendo el brazo al rededor de los hombros de Kelly, pegándola a mi- algún problema?

Miré sorprendida a Dan y sobre todo, ante su gesto. Tuve el ademán de apartarle, pero así me sentía más segura. Clive arqueó una ceja y miró de arriba a abajo a Dan, sopesando las posibilidades. Pero era un cobarde.

-¿Ahora te has echado novio? -bufó-

Me puse nerviosa.

-No, es... es... -miré a Dan a los ojos- es mi primo.

Clive le miró una vez más antes de chasquear la lengua y largarse de allí murmurando algo. Me las tendría que volver a ver con él. Miré de nuevo a Dan.

-Gracias... -sonreí- una vez más. ¿Qué haces aquí?

Tenía los puños cerrados con fuerza, controlándome para no rebentarle la cara al niñato ese. Miré a Kelly, apretando tambien la mandíbula y me relajé un poco- me pillaba de paso..

Negué con la cabeza. -Me gusta cuando mientes -me puse de puntillas para besarle la mejilla- ¿Qué tal el día?

No es del todo mentira..-sonreí- vengo del trabajo.. he estado alli toda la mañana y he salido un poco antes, resulta que el instituto está al lado de la oficina

Sonreí y tiré de su mano. -Entonces te tendré que invitar a comer algo, seguro que vienes más hambriento que yo -reí

pues no voy a negarlo.. me muero de hambre.. -dije asintiendo con la cabeza sonriendo.

Paseamos un poco más hasta la cafetería que había cerca del instituto.
-Espero que no te importe que nos quedemos aquí, tengo muchísima hambre y hacen unas ensaladas deliciosas -sonreí

Miré alrededor, sabiendo que era un poco arriesgado, pero aun así accedí- si dices que estan tan buenas..tendré que probarlas

Le sonreí ampliamente y le pedí dos ensaladas al camarero, pidiendo también mi bebida, juegueteando con mi pelo y mirándole mientras pedía la suya,

La miré sonriendo de lado esperando a que pidiese ella- así que vienes a menudo a este bar? vienes sola?

Asentí y aparté la mirada. -Me gusta estar sola. Comer es como un ritual y no suelo compartirlo con todo el mundo -bromeé-

me tengo que sentir afortunado entonces? pero tu tambien.. -sonreí- yo siempre como y ceno solo

Sonreí de medio lado, pasándome un mechón de pelo tras la oreja. -Ya me lo sentía antes de que dijeras nada -susurré- Voy al baño -me levanté, tratando de escapar de esa conversación. Me encerré en el cuarto de aseo y me saqué una de las pastillas, tragándomelo con agua del grifo. Volví donde él.

Sonreí embobado cuando dijo aquello y esperé a que volviese. Al verla sentarse de nuevo la miré y limpié suavemente una pequeña gota que escapaba de sus labios.

Le sonreí y cogí el tenedor. -Que aproveche

Has tomado una pastilla no? -susurré mirándola

Aparté la mirada, incómoda y casi me atraganto con la lechuga. -Dan... -dije a modo de respuesta

Resoplé y me metí la lechuga en la boca de mala gana.

-Deja de hacer de padre, o de hermano mayor. No te preocupes, por favor. Me siento mal.

-¿Un amigo? -dije alzando la ceja- No sé por qué te pones así.

da igual.. déjalo Kelly.. -dije negando con la cabeza y seguí comiendo. NI siquiera yo sabía por qué me había puesto así...los cambios que estaba teniendo no eran normales, y sabía que todo se debía a ella.