We'll Carry On. [Kobra & Kelly]

Hacía unos días que había vuelto de aquel extraño encontronazo con Eric. Raro era poco, pero mi vida había sido surrealista desde el momento en el que me empezaron a meter Battery en el cuerpo, vivía al límite, cada vez tenía más problemas y mi vida pasaba de la mayor seguridad al mayor peligró en cuestión de minutos.

Suspiro y me levanto de la cama. Abro las cortinas y me encuentro un espléndido día soleado. Además es sábado, un gran día para poder pasear. Aún no he hablado con Dan sobre lo que pasó con mi coche ni por qué tenía una moto de una patrulla de los SCARECROW, pero no tengo ganas de volver a discutir con él. Al final acabaremos matándonos el uno al otro.

Algo dentro de mí desea saber algo de aquel chico, deseo saber si está bien. Si le pasó algo. Si se recuperó. Sacudo la acbeza y dejo preparado el zumo mientras me doy una ducha rápida y me visto.

Spoiler:

Dan está trabajando y yo necesito Battery, me queda una sola cápsula y he tenido de nuevo toda la noche de pesadillas. Tomo el vaso de zumo fresco y salgo a pasear por la ciudad, buscando cualquier indicio de alguien que pueda conseguirme la droga.

Llevo parte de la mañana dando tumbos por la ciudad, fingiendo que hago recados, algunas compras... chorradas. Simples tapaderas para que la gente no se dé cuenta de que estoy sin hacer nada, gran pecado para la mayoría de ciudad.

Finalmente la distingo cerca de la calle en la que tuve que asaltarla en su coche y ni corto ni perezoso empiezo a seguirla, primero a una distancia prudencial y poco a poco acercándome más para que se dé cuenta.

Me resulta gracioso cómo nuevamente volvemos a parecer polos opuestos a pesar de que ésta vez sí vamos igual de limpios y de "sosos". Algo necesario para que no me salten veinte Draculoids encima nada más pisar la calle.

Cuando noto que empieza a ponerse nerviosa me río por lo bajo pero decido no prolongar por más tiempo el "juego".
-Kelly...- pronuncio su nombre para que se decida a girarse y observo su vestido con disimulo -Te prometí que te buscaría y volvería entero, ¿recuerdas?

Spoiler:

Estoy frustrada, jodidamente frustrada. Parece que todos los camellos de la ciudad se han escondido cuan ratas, eso me cabrea, mucho, demasiado. Para colmo, empiezo a sentir cómo alguien me obersva y me empieza a seguir. Acelero el paso, preocupada por si es alguno de esos cabrones del instituto con ganas de joderme el día, o uno de esos soldados obsesionados con darme una paliza.

Empiezo a sentirme cada vez más cohibida hasta que escucho mi nombre, al principio no reconozco su voz, hasta que le veo, está distinto. Me giro lentamente y me lo encuentro, y no puedo evitar sonreír.

-Hola eh... -no sé cómo llamarle. ¿Kobra? Sería demasiado arriesgado. ¿Eric? Pero lo odia. Pero a mi me gusta. Sonrío- Hola, Eric -me acerco a él mientras paso un mechón de pelo tras mi oreja- Se te ve bien, aunque llamas un poco la atención -río- ¿Quieres tu brújula? Puedo ir a buscarla a casa... ¿Todo bien? Me has dado un susto de muerte con esa extraña faceta tuya de stalker.

Sonrío y aprovecho para observar su cuerpo para ver si hay rastros de su herida, pero no lo parece.

-¿Llamo la atención? Pues te aseguro que me he puesto lo más formal y serio que he podido encontrar...- me miro un poco la corbata, que la verdad es que molesta lo suyo, pero me limito a encogerme de hombros. A fin de cuentas ya es tarde para plantearse otro conjunto.

-Es que todavía hay muchas cosas sobre mí que no sabes- le guiño un ojo y tras mirar alrededor un instante, un efecto reflejo que no puedo evitar, le paso el brazo alrededor de los hombros y empiezo a caminar. No creo que quedarnos quietos sea la mejor opción para pasar desapercibidos aunque también puede ser que sea demasiado paranoico y precavido.

-No hace falta que me devuelvas la brújula, puedes quedártela, tengo más. Así recordarás el día en que conseguiste dejar atrás a una patrulla en una persecución...- primero sonrío pero después me doy cuenta de que no debería haber dicho eso en voz alta. Por suerte no parece haber nadie cerca de nosotros.

-¿Hay algún sitio en el que podamos hablar con libertad y mirarnos sin que nos acusen de escándalo público?- no es que tenga intención de meterle mano en medio de la calle, ni mucho menos, pero admito que un abrazo hubiera estado bien.

Sonrío y asiento con intensidad.
-Vas entero de negro, y mira que aquí no hay mucho colorido, pero... -me encojo de hombros- ¡no sé! ¡Llamas la atención!

Pego un pequeño brinco al sentir su brazo sobre mi, no estoy acostumbrada al contacto físico con la gente, me pone nerviosa.

-Yo... Gracias por la brújula -digo bajando la mirada- Pero no es la primera vez -río y poco a poco me suelto, para ponerme frente a él- ¿Escándalo público? -digo alto y rompo a reír- Si quieres puedo invitarte a mi casa... Total, tú me invitaste a la tuya.

-Debe de ser por el pelo...- me paso una mano por el extraño peinado que he escogido haciéndome el interesante, como si pudiera resultar sexy de alguna forma imaginaria. Evidentemente sé que no es así por lo que enseguida me río burlonamente, procurando no ser muy ruidoso. Ésta ciudad me pone de los nervios, me siento observado incluso aunque no haya nadie cerca nuestro.

-¿Que no es la primera vez...?- la miro de arriba a abajo con los ojos abiertos de par en par, sorprendido -Supongo que ahora tiene más sentido entonces...- me quedo pensativo un momento pero acabo mordiéndome la lengua. Mejor no hablar de éste tipo de cosas aquí.

-Genial, aunque seguro que la tuya no tiene cucarachas, ¿eh?- empiezo a seguirla con tranquilidad hacia su casa, dejándome guiar por sus pasos en el laberinto de calles. A mí me parecen todas exactamente iguales.
-Y... esto.... ¿no tendrás una nevera por casualidad...?- me siento un poco ridículo preguntándoselo pero para mí es algo fuera de lo habitual. ¿Cada cuanto tiempo tengo la oportunidad de consumir algún producto fresco? No sé, quizá un par de veces o tres al mes.

Mientra tanto nos adentramos en un bloque de pisos que me resulta sombrío y frío se mire por dónde se mire y nos metemos en el reducido ascensor para subir, momento en el que me aflojo la corbata porque hace calor.... ¿no...?

Sonrío al verle pasarse la mano por el pelo, es verdad, le tiene distinto. Río y le quito hierro al asunto, en realidad da igual cómo vaya vestido, se le nota tan tenso que busco el camino más rápido para llegar a casa.

Ladeo la cara mientras habla del "tema", pero ambos sabemos que no es muy normal de hablar de cosas así en mitad de la calle, esperaremos a alcanzar el apartamento para poder estar tranquilos, sobre todo él, parece más perdido que un pulpo en un garaje. Eso me saca una sonrisa, con lo fuerte y duro que es tiene la misma expresión que un niño pequeño dulce.

-Claro que tengo nevera -me muerdo el labio inferior recordando el estado de su "casa"- y llena, además, cerveza, coca cola, fanta, comida a más no poder.... Puedo preparar algo de merienda-cena, si te apetece -sonrío y abro la puerta del portal y nos metemos en el ascensor. Aún está más tenso y no logro adivinar el por qué. Miro hacia el suelo, sintiendo cómo se colorean mis mejillas.

Off. Si quieres podemos seguir aquí. [url=Casa de Kelly]https://dangerdays.forosactivos.net/t108-mi-humilde-morada-kobrakelly#5122[/url]