Estás loca [Stella]

Me reuní con Stella en cuanto recibí su mensaje, aunque tuve que cojer una moto, ya que el día de su escapada, ella se había llevado mi coche. Sonreí cuando llegué al punto de encuentro, detrás de unas dunas y me crucé de brazos, esperándola.

Aparqué el coche justo en el quilometro donde había quedado con Alec.
Había salido de la base escuchando los gritos de Alex, con el rostro empapado de lagrimas y con la tarrina de helado entre las manos. En momentos como estos me maldecía por no estar viciada al tabaco, seguramente engordaría menos que con el vicio del chocolate.
Apagué las luces y salí del coche justo después de secarme la cara con las mangas de la chaqueta.

En cuanto la vi bajar del coche supe que algo estaba mal y la abracé con tranquilidad.
-¿Qué ha pasado? ¿Estás bien?-pregunté preocupado.-Bueno, si quieres me lo cuentas. Tenemos asuntos más importantes-empecé a hablar.-Korse quiere nombres y direcciones. O alguna forma de capturar a alguno y matarle rápido.

Acepté su abrazo. Me mordí el labio inferior con fuerza, intentando no arrancarme a llorar como una idiota delante de él.
Enterré mi cara en su pecho y suspiré. "Stella eres fuerte" pensé para mí misma una y otra vez. Si, era fuerte. Había conseguido escapar de Korse en muchas ocasiones y había estado en la base de los SCARECROWS y también había salido con vida de allí. ¿Porque esto iba a afectarme tanto?
- No me pasa nada. - dije separándome de él. - ¿Nombres? Esta bien. Little Bastard en realidad se llama Holly Storm. Conduce una yamaha, es rápida así que necesitaremos a los mejores conductores que tengamos. Tú por ejemplo - afirmé - Y quiero que os la lleveís rapido, me esta tocando los huevos de manera brutal. Hacedlo mientras yo esté en la base con alguien que me vea, no podrán acusarme si estoy allí.

-Vale, a ver. Little Bastard, Holly Storm, Yamaha Negra, rápida. Vale-lo anoté todo.-¿Tiene buena puntería? ¿Edad?

Asentí.
- Es muy buena, en todo, no la subestimeis. - afirmé con asco. - Diecisiete años, rubia, mona.

-¡Me vacilas!-reí.-¿Diecisiete años y es buena en todo? Mmmm...

Puse los ojos en blanco.

-Vale, vale-sonreí.-Yamaha negra, rubia, rápida. Pondré a los hombres a trabajar y haré guardia. ¿Contenta?

Asentí y me giré para volver a mi coche.

Rodé los ojos y regresé a la base para poner en movimiento todo.